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martes, 28 de febrero de 2023

EL CASO ENRIQUEZ NEGREIRA

ARTÍCULO DE JOSÉ RAMÓN YÚFERA GINÉS.

Desde la desazón y tristeza tras el batacazo del pasado 26 de febrero, como tantas otras veces, encuentro algún desahogo en escribir sobre éste nuestro SFC que nos trae de cabeza. No voy a referirme en nada al encuentro ni a los groseros errores de planteamiento inicial y en las postrimerías del choque de nuestro primer entrenador, sólo escribiré que Fernando Reges quizá deba ser sancionado por el club ante su irresponsable conducta, en su descargo hay que argüir que estaba desquiciado con toda seguridad, como Jesús Navas y Bryan Gil cuando fueron al banquillo, pero no por la conducta del canario Pulido Santana, sino por la del propio Sampaoli. Del mismo modo que el bueno de Fernando debiera ser sancionado, el cuerpo técnico, Sampaoli y Desio, debieran pedir perdón al equipo por sus gravísimos errores de planteamiento inicial y de sustituciones al final.

Si algo bueno ha tenido la derrota ante el muy bien trabajado C.A. Osasuna es que el 75 u 80 % de la afición, desconocedores de amargas vivencias que los veteranos hemos sufrido más de la cuenta y que aún pensaban en otras cotas, ha aterrizado por fin en la realidad del objetivo en ésta temporada: la salvación. Como última reflexión sobre la parcela deportiva escribo que tras la defenestración tardía de Lopetegui, en el Club, tendrían que haberse dado cuenta de la realidad y haber apostado por un entrenador que no tenga ataques de su profesión y que comprenda que no hay mimbres para el juego que tiene en su manual. No sé si el SFC tendría más puntos pero estoy seguro de que su entrenador, perfil Mendilíbar, Bordalás o Caparrós, sería verdaderamente consciente de la realidad del equipo y no haría experimentos.

Aquí nadie nos va a regalar nada, la jornada desde el Viernes en el Martínez Valero hasta el domingo al filo de las 23:00 horas fue nefasta para los intereses clasificatorios del Sevilla. Me refiero a esto porque el SFC no dispone de palancas, ni de influencias en la prensa ni en las instituciones del fútbol o políticas, que contribuyan a ayudarlo. Nunca se ha conducido por la senda de un servilismo histórico que concite las simpatías de los que manejan la propaganda del fútbol. Sólo es dueño de su historia.

En éstos días ha saltado la noticia de los presuntos pagos por parte del FCB a la empresa del ex árbitro del colegio catalán Enríquez Negreira, vicepresidente del comité técnico de árbitros hasta 2018, a cambio de supuestos "informes" sobre otros árbitros y de cómo debían comportarse los jugadores "blaugranas" ante ellos.  Quien esto escribe lo ha denunciado en diversos foros, incluido éste, desde hace mucho. Las competiciones españolas son un fraude, están hechas para que dos, Y SOLO DOS, disputen año tras año el título de liga (con el colaboracionismo de un tercero que encima se autodenomina "el pupas") sencillamente porque es lo que vende en términos mediáticos. Y además están diseñadas para que tres tengan asegurado un puesto Champions quedando un cuarto como hueso que se echa a roer a la jauría.

Aunque mi sospecha la he venido denunciando año tras año, nunca pensé que pudiera ser ten grosera. Ya, con "las palancas" toleradas que auparon a un club perdido en mitad de la tabla en Enero al sub-campeonato el curso pasado, la cosa estaba muy clara. Mientras que los demás hemos de cuadrar y cuadrar números para diseñar nuestras plantillas y afrontar el "fair play" financiero de UEFA, FIFA y "Sumsum Corda" y el límite salarial de Tebas, al FCB se le permitió lo indecible, y lo más llamativo, como en el actual Caso Enríquez Negreira, silencio escandaloso en la Santa Casa Blanca y en sus terminales mediáticas oficiales y oficiosas. Pero lo de la empresa del ex  colegiado catalán es el colmo: cobrar, supuestamente, por asesorar al club sobre cómo deben conducirse sus jugadores en el césped según qué árbitros, que baje Dios y lo vea.

Como viejo aficionado recuerdo al ínclito colegiado que está en el centro del posible escándalo como un árbitro de estilo chuleta, estiradillo, verlo correr movía a la risa. Creo memorizar que el principal "gurú" mediático de aquellos años lo tenía enfilado, no podía pitar al FCB pero si al equipo de sus amores. Por muy internacional que fuese, no fue un buen colegiado lo cual no es ninguna novedad porque en España nunca hubo ninguno, excepto Guruceta Muro.

En clave sevillista, el club se ha pronunciado, a mi entender acertadamente, a favor de una investigación profunda del caso. Ha sido el 1º en hacerlo y luego han venido los demás de la LFP. Accionistas Unidos, agrupación de sevillismo de base como la nuestra, también ha emitido una carta a UEFA para que presione por el esclarecimiento del posible escándalo. Es mi opinión, como abonado del club, accionista, y socio de APA. Si verdaderamente el sevillismo desea que alguna vez termine el monopolio del fútbol en España dirigido y controlado desde Madrid y Barcelona, si verdaderamente, repito, se desea acabar de una vez por todas acabar con el gravísimo problema que es el arbitraje del fútbol en España (que este caso amenaza con dejarlo al descubierto) ésta ocasión no se debe despreciar.

No espero nada, cualquier pensamiento de sanción a cualquiera de los del "tripolio" me parece utópico. Se habla, se escribe, se oye que el "Mes que un club" podría perder títulos de Copa y Supercopa en beneficio del SFC, nada de eso va a ocurrir desgraciadamente, el presidente de la LFP ya lo ha dejado meridianamente claro: hechos que, caso de ser ciertos, han prescrito. Y en este sentido, no me canso de repetirlo, como el año pasado con la crisis económica "culé" y luego sus famosa "activación de palancas", llama poderosamente la atención el atronador silencio desde Madrid. ¿Por qué? ¿Por no querer intervenir en algo que afecta al eterno rival? Yo más bien pienso que van en el mismo barco y que también hubo, hay y habrá quienes desde el CTA "asesoren" a los "merengues" sobre qué hacer en función del personaje que arbitre

APA debe también contribuir a la presión para que el supuesto escándalo se aclare y se depuren responsabilidades imponiéndose las sanciones pertinentes, no por lograr títulos pasados y no ganados en el césped, a pesar de mantener en la retina  la aciaga tarde de mayo de 2016 en la final del Calderón con Del Cerro Grande como protagonista, sino por dar limpieza e igualdad al fútbol en España, y ¿Por qué no? en una temporada como ésta con riesgo cierto de "segundazo"   por nuestra parte, podría darse una sanción contra el FCB vía FIFA que significase un descenso de categoría con lo que el que quedase en puesto 18º permanecería en la Liga Santander. Ya sé que España no es Italia donde la AC Milán o Juventus dieron con sus huesos en la Serie B por escándalos similares, pero aunque la posibilidad de sanciones "haya prescrito" por lo menos uno de los que mangonean el fútbol español, no el principal desde luego, quedaría expuesto en sus vergüenzas ante todos. 

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